Obra de danza autobiográfica y relacional que habita un espacio entre lo ancestral y la inmediatez, los espectadores se convierten en invitados a la casa, transitando los espacios que se acomodan y modifican, que nos contienen. Construimos una casa para habitarla, para invitar al público a habitarla. En un momento en el que toda la información viene de afuera, mirar hacia adentro nos puede dar las respuestas.
Al ser obra de sitio específico los requerimientos técnicos de la pieza dialogan con las posibilidades del espacio asignado. Existen requerimientos de audio e iluminación básicos. La única condición sobre el espacio es que permita crear un recorrido del público y la cercanía con el espectador.
Créditos:
Dirección y performer: Rocío Reyes
Música original: Jail Less
Iluminación: Jésica Elizondo o Gabriela Ruíz
Foto y video: Alejandro Méndez Cervantes
Ensayo sobre la introducción sigue en búsqueda de espacios por habitar. ¿Tienes en mente algún espacio?
